
Comprar un Lamborghini Aventador SVJ Roadster ya es vivir un sueño reservado a un puñado de personas adineradas. Pero, ¿qué ocurre cuando se extiende un cheque de alrededor de un millón de dólares por uno de los superdeportivos más espectaculares de la marca italiana? El empresario e influencer Jordan Welch compartió la experiencia completa de su entrega... y sobre todo la lista de regalos que le ofreció el concesionario Lamborghini.

Sobre el papel, podría imaginarse un baúl lleno de objetos exclusivos, relojes de lujo o miniaturas numeradas. En la realidad, las atenciones son mucho más... modestas.
Regalos de merchandising
Como parte de su paquete de bienvenida, Jordan Welch recibió toallas Lamborghini, pelotas de golf, un llavero e incluso la matrícula oficial de su Aventador, con pegatina. También había algunos pósters y bocetos de diseño, así como una vela aromática.


A continuación, el concesionario completó el conjunto con vasos de whisky de marca, un póster del Lamborghini Urus y tres botellas de vino italiano presentadas en una caja. Por último, se añadieron una camiseta blanca y una gorra (que la madre de Jordan Welch pidió inmediatamente, según ella).

Reacciones diversas
El vídeo del unboxing circuló por Instagram, pero las reacciones fueron diversas. Algunos seguidores felicitaron al comprador y destacaron el carácter simbólico de estos regalos. Otros, en cambio, ironizaban sobre la debilidad del paquete: "Parece un lote para 50 $", leían, mientras que otro internauta bromeaba: "¡Hasta Toyota te regala un reloj cuando compras un Prius!".
Pero el verdadero regalo es el Aventador
Lo más importante, por supuesto, es el coche. El Aventador SVJ Roadster se vendió por unos 450.000 euros cuando salió al mercado. Hoy, el disparado precio del Aventador SVJ Roadster lo ha llevado a superar el millón de euros, dependiendo de su configuración y kilometraje (un modelo vendió 1,2 millones de $ en julio de 2025). Lo que pone en perspectiva la importancia de las bondades que ofrece Lamborghini.
Mientras que algunos pueden encontrar los regalos decepcionantes, otros señalan que estos artículos forman parte del estilo de vida que la marca lleva años desarrollando. Moda, accesorios, vinos italianos... Lamborghini no sólo vende coches, vende un estilo de vida. Y no importa si las pelotas de golf parecen triviales: poseer un Aventador SVJ Roadster ya es el mejor regalo de todos.