Puede que te hayas perdido este loco proyecto de Estados Unidos. Este Lamborghini Del Huracán, apodado "Burntacan", poco queda de sus orígenes italianos, aparte de su silueta. Propiedad del canal de YouTube "B is for Build", se ha transformado en una auténtica máquina de guerra de carreras de aceleración.
El eslogan del canal marca la pauta: "Arreglamos coches, rompemos coches, compramos, vendemos e intercambiamos coches, todo con el objetivo último de divertirnos". Y ese es exactamente el espíritu de este loco proyecto: desmontar, soldar, reinventar, a veces romper... pero siempre con buen humor.
Una versión Mad Max del Huracán
Este proyecto no es nuevo. El equipo rescató un Huracán accidentado en 2019 y lo reconstruyó por completo en torno a un motor LS V8 biturbo con caja de cambios manual. Un sacrilegio para los puristas, pero un sueño para los aficionados a la mecánica extrema.
El coche ha sido rebautizado como Burntacan, un guiño a su vocación como dragster. Con alerones modificados, electrónica reconstruida desde cero y un salpicadero reconstruido con interruptores personalizados, todo ha sido diseñado para el rendimiento. ¿Y el estilo? Un cruce entre Mad Max y Fast & Furious.
981 caballos... casi 1000
Para su última evolución, el equipo ha retocado toda la electrónica, rehecho el cableado, simplificado el sistema de combustible y mejorado los inyectores. El resultado: ell Burntacan alcanzó 981 CV en el banco de potencia, cerca de su objetivo de 1.000. Pero un problema impidió que la potencia se modulara como estaba previsto, lo que hizo que el coche fuera... un poco demasiado brutal para su creador.
Como no se sentía preparado para conducir un coche de tracción trasera de 1.000 CV durante 400 metros, confió el volante a Cletus McFarland, un famoso piloto especializado en carreras de aceleración.
Récord del mundo en juego
Fue en el LS Fest West donde el Burntacan dejó su huella. A pesar de un mapa motor imperfecto y un comportamiento caprichoso del motor a altas revoluciones, Cletus marcó un tiempo de 12,665 segundos a 188 km/h, lo que supone un récord mundial para un Lamborghini Huracán con caja de cambios manual.
El coche podría incluso haber aspirado a los 10 segundos si hubiera tenido más tiempo de puesta a punto in situ. Pero el simple hecho de que fuera capaz de alinearse en la pista, rodar a fondo, sin problemas, y que un piloto externo fuera capaz de tomar el control inmediatamente fue suficiente para que el equipo se sintiera orgulloso.
¿Se prepara una secuela?
Desde entonces, B is for Build ha seguido adelante con otros proyectos igual de locos, como la reconstrucción de un Lamborghini Murciélago con... una impresora 3D. Pero el diseñador no descarta volver a llevar el Burntacan a la pista, especialmente en Florida, en Cletus, para aspirar a un tiempo aún mejor.
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