En Miami, en el corazón de la Semana del Arte, Fiat ha elegido uno de los mayores acontecimientos artísticos del mundo para anunciar una noticia que podría cambiar su imagen en Estados Unidos: el pequeño Topolino cruzará el Atlántico. Y para dejar su impronta, la marca italiana no se ha andado con medias tintas. Junto con el artista de renombre mundial Romero Britto, ha desvelado una pieza única, bautizada "Brittolino", un Topolino transformado en obra de arte, expuesta en el Britto Palace, el estudio de artista más grande del mundo.
Britto, maestro del arte pop contemporáneo, es conocido por sus colores brillantes, su universo alegre y su peculiar forma de transmitir optimismo y amor a través de su obra. Su colaboración con Fiat parece casi natural. Juntos han creado un diseño que simboliza exactamente lo que el Topolino quiere representar en Estados Unidos: color, buen humor y una nueva forma de desplazarse.
Olivier François, el jefe de Fiat, no se contentó con inaugurar una obra de arte. Se le escapó un anuncio que nadie esperaba: el Topolino debutará oficialmente en el mercado americano. El modelo, ya popular en Europa, ha estado probando discretamente su potencial en Estados Unidos con apariciones en el Concurso de Elegancia de Greenwich, el Salón del Automóvil de Nueva York y, posteriormente, el Salón de Los Ángeles.
Hay que decir que no se parece a ningún otro coche americano. Con 2,53 metros de largo, dos plazas, una velocidad máxima de 45 km/h y un pequeño motor eléctrico de 8 CV, el Topolino hace que algunos kei cars japoneses parezcan gigantes. En Estados Unidos, podría convertirse rápidamente en la alternativa con estilo a los coches de golf. Nadie sabe aún si Fiat podrá mantener un precio tan agresivo de 9.890 euros al otro lado del Atlántico, pero la intención está clara: democratizar la movilidad eléctrica en su forma más sencilla. Fiat promete más detalles en los próximos meses.
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