Restauran un Ferrari F430 comprado por menos de 10.000 euros: el resultado es asombroso

Un milagro autónomo. Esta es la historia de la increíble aventura del Mecánico PVN, unn entusiasta YouTuber se ha hecho con un Ferrari F430... por menos de 10.000 euros (o más exactamente 10.957 dólares). Un precio inimaginable para un Ferrari ? No cuando es una ruina.

¿Un F430 por 10.957 dólares?

La escena empieza como un sueño: el hombre compra por fin el supercoche de sus sueños. Pero cuando abre las puertas de este F430, le recibe un olor nauseabundo y un interior ruinoso. Carrocería sucia, piezas que faltaban, componentes rotos, olor a aceite y moho: este Ferrari estaba a un paso de la trituradora.

Bajo el capó, es peor. Una cadena de distribución rota, fragmentos de metal en el motor y un pistón gravemente dañado. La situación es crítica. El F430 no sólo está averiado, está clínicamente muerto.

Deconstruir para reconstruir

Ante la magnitud de los daños, el mecánico PVN decidió desmontarlo todo. El motor, el cigüeñal, el árbol de levas, las culatas, los pistones y las camisas son todos originales. Prácticamente todos los componentes internos han sido sustituidos.

Pero la cosa no acaba ahí. Para que el F430 volviera realmente a la vida, también tenía que recuperar su aspecto. Tras reparar los parachoques delantero y trasero, lijar la carrocería y aplicar masilla, el supercoche entró en la cabina de pintura. Gracias a los códigos de color originales de Ferrari, se le ha dado un rojo impresionantemente brillante.

Tras decenas de horas de minucioso trabajo, el equipo volvió a montar el motor, restauró el interior, sustituyó los casquillos de la suspensión, cambió los accesorios e incluso los asientos. Al primer intento de arrancarlo, el motor V8 tose, pero no se rinde. La culpa la tenía un sensor defectuoso. Fue reemplazado, y esta vez... el rugido fue claro: el Ferrari F430 vuelve a la vida.

En carreteras cerradas, el italiano ruge con renovada potencia. El chasis está sano, el motor es suave y el escape vuelve a cantar. Es imposible imaginar que hace sólo unas semanas, este coche era una ruina destinada a la destrucción.