
Comprar un Ferrari por el precio de un Toyota Camry: ese es el tipo de reto alocado que se proponen regularmente los participantes en "Car Trek", una conocida serie automovilística de YouTube. Uno de ellos lo intentó con un Ferrari 456 GT V12 de 1994, que consiguió importar de Dubai a un precio imbatible. Un buen negocio sobre el papel. Pero el resto resulta ser una pesadilla mecánica y financiera... e incluso un poco intestinal.
Un 456 GT aparentemente perfecto...
El vehículo en cuestión lo tenía todo: un V12 de aspiración natural, una rara caja de cambios manual y menos de 16.000 km en el reloj. Sobre todo, costaba una fracción del precio habitual, porque había sido importado de Dubai. A ese precio, el propietario sabía que no estaba comprando un Ferrari perfecto. Pero no esperaba lo que estaba por venir.

En el momento de la entrega, aparecen las primeras dudas: el coche sólo funciona con una bancada de cilindros, es decir, seis en lugar de doce. El cableado eléctrico es un desastre, y varios componentes han sido improvisados. La carrocería ha sido completamente repintada, probablemente tras un violento impacto trasero. Incluso la luneta trasera ha sido sustituida, obviamente de segunda mano.
1.600 km de viaje por carretera antes de la reventa y... nuevos problemas
Una vez reacondicionado para "Car Trek", el Ferrari se embarcó en un viaje por carretera de más de 1.600 km a través de Estados Unidos, entre Texas y Colorado. Contra todo pronóstico, el 456 resistió bien. El propietario lo dio todo, aunque fuera conduciendo de noche a velocidad de vértigo por carreteras bordeadas de barrancos... antes de descubrir por la mañana que había coqueteado literalmente con la muerte, puesto que varios coches ya habían caído al abismo, y algunos de los cadáveres habían sido abandonados en el fondo de los acantilados ante la imposibilidad de volver a subir.
Decidió vender el 456 GT y un 355 Spider a Dan, del canal de YouTube 'Normal Guy Supercar'. Pero unos días después, se conoció el veredicto: el 456 sobrecalentado, junta de culata fuera de servicio, motor listo para el desguace. El nuevo propietario descubre humo blanco por el tubo de escape, fugas de refrigerante como una caldera... y un coche que ya no se puede utilizar.

Sintiéndose responsable, el vendedor volvió a comprar el Ferrari y decidió repararlo de nuevo, a pesar de las dudas sobre su viabilidad, ya que descubrió que el motor ya había sido "reconstruido" y las culatas cepilladas.
¡Feliz final!
Contra todo pronóstico, las reparaciones son posibles. Y sorpresa, sorpresa: el minorista de Dubai (Tamini Classics) admite cierta responsabilidad y contribuye económicamente a las reparaciones (quizá por la buena o mala publicidad en Youtube), explicando que había despedido al mecánico responsable de la matanza.
Un año después, el Ferrari estaba listo para volver a funcionar. Incluso se vendió por 10.000 dólares más que su precio de compra, aprovechando la subida de precios de los Ferraris manuales en el mercado.
Importar un Ferrari barato del extranjero puede parecer un buen negocio, sobre todo cuando es raro, manual y tiene poco kilometraje. Pero detrás de un precio atractivo pueden esconderse docenas de defectos ocultos, reparaciones complejas... y repetidos sudores fríos.
Comprar chatarra usada... pero que idea . Deja los Ferraris para los que tienen dinero para tirar por la ventana y en su lugar comprar buenos coches 🤣.