
Desde hace varios meses, los rumores de un acercamiento entre Max Verstappen y el Scuderia Ferrari vuelve por oleadas, alimentado por confidencias, declaraciones públicas y, sobre todo, por el futuro aún incierto del tetracampeón del mundo más allá de su contrato con Red Bull. En Zandvoort, como en Monza, la pregunta estaba en boca de todos: ¿y si Verstappen se uniera algún día a la Scuderia Ferrari?
Hay discusiones... pero nada concreto
Jos Verstappen, padre y consejero de Max, admitió recientemente haber mantenido "conversaciones informales" con la dirección de Ferrari. En estas conversaciones podrían haber participado John Elkann o incluso Piero Ferrari, pero sin desembocar en una oferta en firme. Suficiente para reavivar las especulaciones, sobre todo porque el futuro de Verstappen después de 2026 sigue abierto.
Aunque Mercedes parecía la opción más creíble en caso de salida, Ferrari ha entrado ahora en la ecuación. Pero los obstáculos son evidentes: Charles Leclerc tiene una prórroga de larga duración y Lewis Hamilton, contratado en 2025 con un contrato plurianual, parece que se quedará hasta 2027.
Verstappen: "No es cuestión de buscar la pasión
En Monza, el propio Max Verstappen dio una respuesta clara a estos rumores al periodista de Motorsport Roberto Chinchero. Aunque entiende la fascinación por la marca del Cavallino Rampante, se niega a dejarse guiar solo por la pasión:
"Ferrari es una marca muy grande y, por supuesto, todos los pilotos se dicen a sí mismos: 'Me gustaría conducir para Ferrari'. Pero creo que ahí está el error, en querer pilotar para Ferrari. Si quieres pilotar para Ferrari, quieres ganar. Así que si algún día quisiera ir, no iría sólo para decir que conduzco para Ferrari, iría porque veo una oportunidad de ganar".
Un discurso medido, fiel a la imagen de un Verstappen pragmático, más apegado al rendimiento que a los símbolos.
¿Una posible ventana en 2028?
A corto plazo, la llegada del holandés a Maranello parece poco probable. Leclerc y Hamilton tienen asegurado el asiento del piloto hasta 2027. Pero a partir de 2028, las cartas podrían barajarse de nuevo, justo en el momento en que Red Bull tendrá que confirmar su competitividad con la nueva reglamentación.
Mientras tanto, Verstappen no descarta nada, ni siquiera dejar la F1 para explorar otras disciplinas como las carreras de resistencia. "Ni siquiera sé cuánto tiempo voy a permanecer en la Fórmula 1", confió, recordando que ya se estaba cansando del "circo" de este deporte.
Estas "conversaciones informales" con Ferrari pueden interpretarse de dos maneras: como una apertura real hacia un futuro rojo, o como una forma de presionar a Red Bull de cara a 2026. En cualquiera de los dos casos, el mensaje es claro: Verstappen ya mira más allá de su contrato actual y no descarta un cambio radical.